Razones por las que no funciona el start-stop
Razones por las que no funciona el sistema Start-Stop
Si eres un conductor, seguro que has utilizado alguna vez el sistema start-stop en un coche. Este sistema permite que el motor se apague automáticamente cuando estamos detenidos en un semáforo o en un atasco, y se vuelva a encender cuando pisemos el embrague para arrancar.
En canaribat vamos a darte las claves para saber si el sistema start-stop de tu coche no funciona, en este artículo veremos algunos de los principales motivos por los que esto sucede.
Motivos por los que puede fallar el start-stop
1- La gestión de la batería desactiva la función start-stop
Los sistemas de administración de baterías protegen este elemento tan importante del coche al deshabilitar la función de arranque y parada cuando están demasiado bajas para arrancar el automóvil.
Esto evita el desgaste innecesario del motor de arranque.
Las baterías de los coches tienen una duración determinada y ofrecen un número limitado de ciclos de carga antes de dañarse.
Esto significa que con el tiempo la capacidad de carga de un vehículo será cada vez menor, y por lo tanto el start-stop podría dejar de funcionar por completo.
La única solución si este problema comienza a darse de forma habitual es cambiar la batería por una nueva.
2- Fallos en la detección de la batería
Es posible que el sistema start-stop del coche no funcione de forma correcta porque los sistemas encargados de monitorizar el estado de la batería no funcionen correctamente.
Esto hace que el sistema de gestión de la batería del que hablábamos anteriormente sufra un fallo, ya que el nivel de carga de la misma ni siquiera está siendo registrada por el vehículo.
Si este es el caso, suele tratarse de algún problema de software o de cableado que puede solucionarse de manera relativamente sencilla.
3- Temperatura demasiado elevada o baja
La función start-stop de un coche también puede verse afectada por la temperatura exterior.
Si hace demasiado calor o demasiado frío, el sistema start-stop se desactivará automáticamente para proteger al motor.
4- Las puertas del coche están abiertas o el cinturón de seguridad no está abrochado
Si las puertas del coche o el cinturón de seguridad no están correctamente cerrados o abrochados, también es posible que la función start-stop no funcione. En este caso, lo más habitual es que el coche no vuelva a arrancar después de haberse detenido.
Esto es debido a que el sistema start-stop requiere que todas las puertas y el cinturón de seguridad del conductor estén correctamente bloqueados para poder funcionar correctamente. Se trata de un sistema de seguridad que impide que el coche se ponga en marcha en situaciones en las que pudiera existir algún tipo de peligro para los pasajeros del vehículo.
5- Se ha activado el sistema de aparcamiento
Los coches más modernos suelen estar equipados con un sistema de aparcamiento que se activa automáticamente en determinadas situaciones, como por ejemplo cuando el vehículo se detiene por completo durante un tiempo determinado.
Este sistema suele bloquear las ruedas para impedir que el coche se ponga en marcha, y también desactiva la función start-stop. Así se evita realizar un gasto innecesario de batería o poner a los tripulantes en una situación peligrosa.
Por lo tanto, si el start-stop de tu coche no funciona, es posible que este sistema esté activado. En este caso, bastará con desactivarlo manualmente para que la función start-stop vuelva a funcionar de forma correcta.
6- El coche está en una pendiente muy elevada
Si el start-stop de tu coche no funciona en algunas situaciones concretas, es posible que simplemente estés en una situación en la que el vehículo está detenido en una pendiente muy pronunciada.
En este caso, lo más habitual es que el start-stop se desactive automáticamente para impedir que el vehículo se ponga en marcha sin control. Se trata de un sistema de seguridad pensado para evitar accidentes y para hacer que el conductor mantenga su atención centrada en la carretera.
Como te puedes imaginar, para solucionar este problema, bastará con cambiar la posición del vehículo y detenerlo en un lugar donde la pendiente no sea tan pronunciada. Sin embargo, esta situación puede ser difícil de detectar en ocasiones.
Como puedes ver, el hecho de que el start-stop de tu coche no funcione no tiene por qué significar que se han estropeado la batería o la electrónica del vehículo, al contrario de lo que mucha gente piensa.
Sin embargo, si crees que tu coche tiene algún problema más serio, lo mejor será que acudas a un taller y solicites un diagnóstico del problema. De esta forma podrás solucionarlo de forma rápida y eficaz.